Hay épocas en la que el cansancio, la falta de horas para ocuparse de uno mismo, la crianza de los hijos u otras preocupaciones hacen que se genere un ambiente malhumorado en la pareja, entrando en un bucle del que resulta difícil salir.
Para romper esta tendencia os propongo una actividad muy sencilla, para hacer en pareja, que seguro que puede ayudar a fortalecer la pareja y a que afloren los sentimientos positivos.
Se trata de la caja de los elogios, una idea original del terapeuta familiar estadounidense Selekman.
La caja de los elogios
Coger una caja (puede ser una caja de cartón que decoréis vosotros mismos, una caja envuelta en papel de regalo, o una que compréis especialmente para este juego), lo importante es que sea bonita y que tenga una ranura en la parte de arriba, simulando que es una hucha.
Una vez elegida la caja, debemos de elegir el lugar dónde la vamos a situar. Junto a la caja hay que poner varios tacos de papelitos.
El ejercicio consiste en que cada día, al final del día, hay que escribir en un papel algo concreto, positivo y sincero que te haya gustado en el día de hoy de tu pareja. Cada miembro de la pareja debe de pensar algo concreto que ese día le haya gustado de su pareja.
Por ejemplo, “me ha gustado mucho que mi pareja me haya dado un beso cuando he llegado a casa”. La idea es que pensemos en cosas cotidianas que nos han gustado al uno del otro, no tienen que ser grandes cosas, sino cosas que están presentes en el día a día pero que son agradables y a veces no valoramos como deberíamos.
Después, una vez tengamos apuntado en un papel lo que nos ha gustado de nuestra pareja en el día de hoy, metemos el papelito, doblado, en la caja de los elogios.
Deberéis establecer un día a la semana para juntaros en torno a la caja de los elogios y abrirla, de esta manera cada miembro de la pareja irá leyendo sus papelitos en voz alta.
Reglas de la caja
– Solo se pueden introducir comentarios positivos dentro de la caja.
– Está prohibido mirar o abrir la caja si no estáis ambos miembros de la pareja.
– El plazo para abrir la caja (diariamente, semanalmente, cada tres días…) depende de cada pareja. Debe ser un momento para concentrarse en la actividad, sin prisas y sin estar pendientes de otros asuntos.
¿Para qué sirve la caja de los elogios?
Cuando estamos enfadados tendemos a fijarnos en aquello que nos molesta y obviamos las cosas buenas o, simplemente, las damos por hecho, en lugar de valorarlas.
Con la caja de los elogios trabajamos para darle la vuelta a esta tendencia. Es una actividad que nos obliga a poner la atención en lo bueno y a quitarle protagonismo a lo que nos molesta, rebajando la tensión.
Por otro lado, cada elogio permite conocer qué cosas son las que más le agradan a tu pareja de ti, dándote la oportunidad de potenciarlas a partir de ese momento.
Gracias a este ejercicio la pareja trabaja en equipo y se refuerzan los lazos positivos entre ellos.
¡Te invito a probar este ejercicio y a que me cuentes que tal os ha ido!