Artículo escrito por Nerea Jiménez
¿Alguna vez has conseguido lograr un objetivo y has sentido que no te lo merecías?¿Crees que tus logros se deben a la suerte o a coincidencias?
Hay ocasiones en las que, a pesar de habernos esforzado para conseguir una meta, nosotros mismos no reconocemos nuestro éxito ni nos sentimos satisfechos por haberlo logrado. Este fenómeno se conoce como síndrome del impostor y se puede aplicar a todos los ámbitos de nuestra vida: laboral, académico, social y personal.
Seguramente en algún momento te has podido sentir así, y es que, parece que reconocemos más fácilmente lo negativo y no lo positivo que hacemos.
Causas:
?Baja autoestima
?Falta de seguridad
?Críticas o comparaciones de los demás durante la infancia y adolescencia en las que parece que nada es suficiente.
?Inseguridades por experiencias pasadas
?Autoexigencia
Cómo se manifiesta:
➡️Creencias sobre no merecer los logros, asociarlos a una coincidencia o a la suerte
➡️Temor a ser descubierto como impostor o a decepcionar a los demás
➡️Insatisfacción y desmotivación
➡️Culpa por “engañar” a los demás
➡️Sufrimiento por no esforzarse lo “suficiente”
➡️Incredulidad ante los cumplidos de los demás
Los pensamientos y creencias sobre nosotros mismos son muy poderosos y pueden generar un gran impacto en nuestra autoestima. Por eso:
?Da valor a tus éxitos y al esfuerzo que pones en ellos
?Acepta los elogios y el reconocimiento de los demás
?No te compares con otras personas
?Trabaja la autoestima y la autocrítica